El director, Leopoldo Muñoz De la Parra, explica el origen del concepto: “hablamos de una escuela de nuevo tipo porque sus preceptos son éticos más que metodológicos, y porque creamos una escuela que promoviera la búsqueda de la felicidad”, una señal de su vínculo con el budismo.
La primera escuela budista de Chile
“El Simce apela a los contenidos mínimos, que el Estado cautela así que no hay argumentos pedagógicos para que estén fuera de la escuela. No hay contradicción”, explica el sostenedor de este proyecto.